Unplugged

Pongo un disco. Tomo una cerveza, y la destapo.
Descubro que no tengo cigarros.. hay que aguantarse.
Quiero disponerme a pensar.. pero no, realmente no tengo muchas ganas de pensar.
Me siento raro, me siento como desconectado. Realmente desmotivado. Y es curioso, porque no me siento mal. Pero estoy en automático últimamente. Con la inercia de no sé qué, hacia no sé dónde. En este momento me dan ganas de picarme un ojo con una vara de madera, para ver si aún estoy vivo.
Me asusta darme cuenta también de que últimamente he estado escuchando menos música. Y cuando escucho, nisiquiera le pongo atención. La música me motiva mucho, en las mañanas me encanta poner algo acorde al humor con el que despierto, o quizás algo que adecúe mi estado de animo dependiendo de lo que vaya a hacer en el día, y así seguir hasta la noche, aprovechando la maleabilidad de la música y mis emociones, dándole un golpecito por aquí, otro por allá, estirando acá, rascándole poquito allá, torciendo un poquito esa parte.. en fin. Pero ahora no. Ya no me motiva.
Trato de iniciar una plática, y no charcho. Trato de escribir algo, y me da weva. Me he limitado a las funciones básicas, respirar, comer, dormir, cagar, y a veces beber. Ni siquiera me llama tanto la atención ahora. Me tomo la primera más obligado que por ganas.
Busco motivación para "algo" en todos lados, y a pesar de que sé que hay de dónde agarrar, nomás no consigo entusiasmarme. No sé si quedarme o irme, si abrir otra cerveza o no (bueno, sí.. pssshtkkk!.. listo), si querer o no, hablar.. pensar.. oír.. ir.. hacer.. no sé, no sé, no sé..
Me viene a la mente la palabra frustración. De repente me visualizé frente a un tablero de ajedrez, en uno de esos arranques utilizando el movimiento super especial de tirar todas las piezas con un movimiento repentino de la mano.. Tengo ganas de hacer eso, pero nomás a medias. Hasta para eso no agarro fuerzas.

Por otra parte, me preocupa mucho mi continuo desinterés. O más bien, mis cambios constantes de atención. Ja, qué bonita manera de denominarlo. De repente estoy pensando en algo, rápidamente me harta, y cambio de.. de qué estaba escribiendo?
Me pasa mucho, con todo. Y sobre todo, mi atención se dirige hacia lo inalcanzable..

Espero que esta inercia me lleve a un buen lugar, y pueda recargar mis pilas.
Por lo pronto, no tengo muchas ganas de pensar, en realidad.